Cuando se trata del éxito, la motivación y la disciplina son dos de los factores más importantes. Pero, ¿cuál es la diferencia entre los dos? ¿Por qué algunos de nosotros luchamos por mantenernos constantes en nuestro entrenamiento mientras que otros siguen y siguen? Vamos a averiguarlo…
La motivación es un sentimiento
Hay días en los que estamos deseando hacer ejercicio y otros en los que preferimos quedarnos en el sofá. La motivación es lo que te impulsa a tomar acción. Es el deseo de lograr una meta, o la pasión por hacer algo.
Pero es bastante inestable. Entonces, ¿qué es lo que te hace subirte a la esterilla y presionar el botón de inicio en la aplicación, incluso si no tienes ganas de moverte? Entra en la disciplina.
La disciplina es una habilidad
La disciplina, por otro lado, es la capacidad de apegarse a un plan o rutina, incluso cuando es difícil. Mientras que la motivación es lo que te hace empezar, la disciplina es lo que te mantiene en marcha. La disciplina nos hará elegir cada día seguir adelante para que finalmente formemos hábitos que se mantengan. Esto es especialmente importante para objetivos como el fitness, ya que requieren mucho tiempo y no muestran resultados inmediatos.
¿Cómo mejorar tu disciplina y crear un hábito?
Lleva un tiempo formar un nuevo hábito, aquí hay algunas maneras de desarrollar tu autodisciplina:
- Empieza despacio
- Es mucho más fácil comenzar con un nuevo hábito a la vez, en lugar de cambiar todo nuestro estilo de vida a la vez. Ve paso a paso, será más fácil engancharte a tus objetivos.
- Usa tu imaginación
- Los estudios han demostrado que cuando te imaginas haciendo tu nueva rutina desde el principio hasta el final, te ayuda a realizarla y engancharte a ella. Por ejemplo, imagina llegar a casa del trabajo, ponerte tu ropa deportiva, desplegar la esterilla, hacer tu entrenamiento, guardar la esterilla, ducharte y lo bien que te sentirás después.
- Seguirles la pista
- Anota tu progreso, usa un calendario o usa una de las muchas aplicaciones de seguimiento de hábitos disponibles. Si tu objetivo es ponerse en forma y estás siguiendo uno de nuestros Training Plans, este es fácil, ya que puedes usar la pantalla de carga de trabajo en la aplicación para mantenerte al día.
- Eliminar obstáculos
- Si planeas despertarte y hacer ejercicio a primera hora, saca la ropa la noche anterior. Elimina cualquier cosa que se interponga entre ti y la acción deseada y que pueda convertirse en una excusa
- Déjate un poco de espacio
- Este es un consejo de nuestra atleta destacada Melanie, ella misma se ha impuesto la regla: un día sin hacer ejercicio está bien, ¡pero no dejes que se conviertan en dos!
- Usa la ayuda de otros
- Cuéntale cada uno de tus objetivos para que puedan impulsarte a seguir adelante y recordarte tus objetivos. O, mejor aún, pídele a un amigo que se una a ti y haz que sea un desafío quién se rendirá el último..
- Recuerdate “por qué”
- Recordar el motivo por el que empezaste te dará una chispa de motivación y con esa ayuda podrás seguir adelante.
Para crear hábitos más saludables y alcanzar tus metas, necesitas motivación y disciplina. Recuérdate “por qué” y así aumentar tu motivación y tu disciplina para dar los pasos necesarios para alcanzar tu meta.
